miércoles, 19 de diciembre de 2012

DESCUBRE AL LADRÓN Y PANZÓN ….




Un viejo barrigón que grita “jo jo jo” llamado Santa Claus y con varios alias más, es el protagonista de la Navidad hoy en día.

Pero realmente el sentido de la celebración de Navidad es el nacimiento de Jesús, no las compras, las luces, y mucho menos Santa Claus, San Nicolás o Papá Noel, personajes ficticios sin un fondo espiritual.

No está mal tener un árbol o tener una cena navideña. La diferencia la hace el saber porqué estás celebrando la Navidad.

El opacar el nacimiento de Jesús fue una estrategia de Satanás, quien al ver que se celebraba el nacimiento de Jesús buscó un sustituto, un espíritu demoníaco llamado Madían. Forjó así una distracción para reemplazar al Mesías, el verdadero protagonista de la Navidad.

¿Quién era Madián? La Biblia lo describe con precisión:
“Era un pueblo que robaba la cosecha y el fruto del pueblo de Israel” (Jueces 6:2-6)

Madián representa a un espíritu demoníaco que hurta la cosecha del pueblo y lo deja en miseria. Es el mismo espíritu que actúa en Navidad, época en la que ocurren la mayor cantidad de suicidios, casos de depresión, peleas familiares; Madián -ese espíritu- roba la paz en los hogares. También roba tu dinero haciéndote comprar lo que no necesitas o no puedes pagar.

El espíritu “Madianita” también roba el corazón de los niños y niñas quienes creen en Santa Claus, como un ser maravilloso y todopoderoso que les trae muchos regalos. 

Jesús es el regalo más grande que vino a este mundo y es la única razón por la cual debemos celebrar la Navidad.
¡Encárgate que todos a tu alrededor conozcan esta verdad!