domingo, 3 de junio de 2012

EL TOQUE DE SUS MANOS



 Y diciendo esto, les mostró las manos y los pies. Lucas 24:40
 

Las manos de Jesús fueron tan humanas, como las tuyas o mías. Manos que fueron dulces y tiernas cuando Jesús era un niño y ásperas y fuertes cuando fue un obrero. ¡El que había formado las estrellas trabajaba como carpintero! En esas manos hay seguridad, providencia y un tierno amor.

Aquellas manos trabajaban la madera en bruto para transformarla en objetos útiles y hermosos. Las manos de Jesús fueron manos generosas, para sanar a los enfermos: y el toque de sus manos aún conserva su poder.

Las manos de Jesús son manos salvadoras. La Biblia describe todo tipo de pecado, pero declara que Jesús nos libra de todos ellos. Sus manos pueden salvar porque son manos heridas, que aún conservan las marcas de la
Cruxificción.

 Y ellas interceden ante el Padre por todos aquellos que invocan el nombre de Jesús. Esas manos cuidarán por toda la eternidad a todos aquellos que le entreguen su vida a Él. Cuando sus manos te toquen, sentirás el perfecto amor.