Perezoso: ¿Hasta cuándo has de
estar acostado? ¿Cuándo te levantarás de tu sueño? Proverbios 6:9
Dios es
un Dios diligente y que siempre está en movimiento. Y es por esto que las
personas que sirven a Dios en ministerios exitosos son personas que siempre
están ocupadas. Haciendo una cosa tras otra.
Hay
quienes, por ignorancia o por pereza,
se
escudan en la fe y la bendición para no ser diligentes. Estas personas esperan
sentados a que literalmente todo les caiga del cielo mientras ellos ven la
televisión. ¡Totalmente equivocados!
Cuando
alguien recibe una palabra profética, que verdaderamente viene de Dios (mucho ojo, hay personas que te hablan porque
quieren parecer muy espirituales) tienes que trabajar por esa palabra.
Moverte en fe.
Si Dios
te dice “-serás un empresario-“, tienes que dar los pasos necesarios para
convertirte en uno. Por ejemplo, estudiar, prepararte, abrir una oficina. No
creas que un día despertarás vestido de saco y corbata, dirigiendo una empresa
exitosa.
Además
algo interesante que quiero destacar es que las palabras proféticas tienen
“fecha de caducidad”, su vigencia no es ilimitada. Así que si no trabajas para
alcanzar esa promesa de Dios para tu vida, caducará y tú seguirás sentado
esperando.
Dios es
un Dios diligente, que cumple sus promesas y que desea que sus hijos sean bendecidos. Pero Dios
está totalmente peleado con la pereza. Los Proverbios están llenos de advertencias
a la persona perezosa; No hay
lugar para la pereza en la vida de un hijo o hija de Dios.
Debemos orar a Dios
pero también accionar. Orar y accionar van de la mano para alcanzar lo que Dios
te ha prometido.