...Con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia. (Jeremías 31:3)
Para la
mayoría de las personas las relaciones sexuales pre-matrimoniales son parte de
la vida normal, incluso aunque no exista una relación sentimental.
Sin
importar la religión, la condición social, éste patrón de ir de cama en cama se
repite una y otra vez. Aunque muchos digan que se puede tener sexo sin
inmiscuir los sentimientos, no es así.
Nuestro
ser está divido en tres partes: cuerpo, alma y espíritu, las que están
conectadas entre sí.
Cada vez
que tienes sexo con alguien estás enlazándote con esa persona y entregando algo
de ti. Es por esto que la mayoría de las personas con este estilo de vida
argumentan sentirse vacíos.
El sexo
sin compromiso tiene como consecuencia embarazos no deseados, enfermedades
contagiosas, virus mortales. Además, estudios sicológicos confirman que tener sexo pre-matrimonial ahora,
significa sexo extra- matrimonial después. ¡Abre bien los ojos antes de elegir con quien
te vas a casar!
Si buscas
amor y aceptación y crees que por medio del sexo lo obtendrás, has estado
engañado (a). La mayor fuente de amor es Jesucristo; Él, a pesar de tus
pecados, te ama y está dispuesto a perdonarte para transformar tu vida.
No
necesitar ir de cama en cama para sentirte amado: busca a Jesús y conocerás el verdadero
amor.